MARÍA RIUS Y “LA GAVETA”

 María era una de los nueve hermanos de que se compuso la numerosa familia Rius de Tarancón (Cuenca). Esta Ilustre familia taranconera, de apellido catalán, tiene su origen en el matrimonio de don José Rius con doña Herminia Zunón; leridano él y aragonesa ella, que se establecieron en Tarancón en el último cuarto del siglo XIX. Estudió pintura en la Real Academia de San Fernando, aunque como la mayoría de los Rius hizo algunas incursiones en el campo de las letras.

En su libro “La Gaveta”, que contiene un prólogo, 24 relatos breves sobre paisaje, sucesos, costumbres y personajes típicos de su pueblo, Tarancón, con descripciones, tipos, costumbres, y expresiones de aquella época y un completísimo glosario de términos ya en desuso o perdidos por haber desaparecido oficios y costumbres con el tiempo. En una palabra, un compendio costumbrista que no tiene precio.

Hemos incluido al final de este relato un pequeño glosario específico de palabras que ya están en desuso, para su mejor comprensión y que seguiré incluyendo en los artículos que iré publicando, por estar más ajustado a la interpretación de las gentes actuales de nuestro pueblo. Al final del libro hay un glosario general elaborado por los editores en México.

Espero que sean de vuestro agrado.

 P.L.O.

 

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La tía Coca la mondonguera

      

Con su vestimenta enlutada que el trajinar de muchos años y el desaliño habían trocado en color de ala de mosca, greñuda, aper-gaminada, manos de garduña, como predestinadas a desgarrar mon-dongos y entresijos*, más bien parecía una figura de aquelarre goyesco que una vendedora. El cabrón*, sin duda, era sustituido por el lebrillo* que llevaba siempre debajo del brazo. De madrugada, medio sonámbula, salía de su madriguera y se dirigía al matadero para disputarse los despojos de las reses, que los matachines re-partían, por unas perras, entre las mondongueras: patas que debían mondar y despezuñar, cuajares y mondongos* que eran los más codiciados para la fabricación del zarajo y el embutido de aquella longaniza que vendían por cuartas, en las abacerías que, junto con los arenques y las tajadas de tocino, servían para complacer las talegas de los jornaleros. La tía Coca pregonaba su mercancía entre sorbetón y refregado de mano. A pesar de su aspecto cochambroso, tenía muchos parroquianos en el barrio y fuera de él, porque su clientela se extendía desde la cuesta de la Perejila hasta los aledaños de la ermita de San Roque, donde había algunas casillas de camineros, guardavías y cocedores*. Los medidores andaban al acecho de los zarajos y las cabezas de cordero, que servían para regodear sus cuchipandas bien regadas con los mejores caldos de las tinajas del cocedor. La gente decía que no tenía rival para la zarajería, por sus adobos y la mano maestra dándoles el punto. Nadie, ni ella misma, supo jamás su edad; parecía como si no hubiera tenido ni infancia ni juventud y que debió nacer tal y como se la veía zancajeando por las calles; arropada con el mantón de pelo de cabra, las sayas folladas sobre su esquelética estructura y llevando una vida miserable, como un despojo más del vetusto matadero que le hacía subsistir.

La Gaveta: VI Relato, pág. 35

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GLOSARIO DE TÉRMINOS EN DESUSO

*Abacería: f. Puesto o tienda donde se venden al por menor aceite, vinagre, legumbres secas, bacalao, etc.

*Cocedor: Parte de la bodega que alberga las tinajas donde fermenta el vino.

*Cuarta: Medida aproximada desde la punta del pulgar a la del meñique con la mano abierta.

*Cuchipandas: Comidas de amigos bien regadas de vinos y licores.

*Entresijos: Cúmulos de grasa entre el intestino y las paredes del abdomen.

*Folladas: Holgadas, con algo de vuelo.

*Garduña: Mamífero carnicero de unos 30 cm. de largo y pelo castaño por el lomo, pardo en el cola y blanco en la garganta y pecho, que se alimenta de huevos de aves, ratones y otros animales pequeños.

*Gaveta: Cajón que suele haber en las mesas de escritorio para guardar las cosas que hay que tener a mano.

*Lebrillo: Especie de barreño pequeño, de cerámica o metal, que sirve para lavar o para el aseo.

*Medidores: Personal destinado a comprobar las medidas o medir los áridos y líquidos in situ para garantizar el peso o el volumen en las transacciones comerciales. Emiliano Lozano plasmó en un magnífico cuadro el Cuarto de los Medidores de Tarancón.

*Mondongos: Tripas de cordero o de cualquier otro animal.

*Zancajear: andar mucho de una parte a otra, por lo común, apresuradamente.

*Zarajería: Oficio y habilidad para hacer los zarajos.

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Pedro López Ocaña

 En Tarancón: Opinión y Cultura

4-11-2020